En el corazón de esta región ha surgido una nueva ola de disturbios que arroja luz sobre los desafíos que enfrentan los residentes en su lucha por sus derechos. Las calles se han convertido en un campo de batalla cuando los miembros del Comité de Acción Conjunta chocan con las autoridades, incluidas las fuerzas policiales y los comandos que dan una imagen de la situación.