El ataque a uno de los últimos hospitales operativos de la zona profundizó aún más la actual crisis humanitaria provocada por el guerra civil entre ejércitos rivales, las Fuerzas Armadas Sudanesas (SAF) y las Fuerzas paramilitares de Apoyo Rápido (RSF), que comenzaron en abril de 2023.
Entre los suministros robados había 2,200 cajas de alimentos terapéuticos listos para usar, un tratamiento crucial para los niños que sufren de desnutrición aguda severa, una enfermedad potencialmente mortal que se caracteriza por pérdida grave de peso y desgaste muscular.
También fueron robados suplementos de hierro y ácido fólico para mujeres embarazadas y lactantes, así como kits de partería y suministros de atención primaria de salud destinados a madres, recién nacidos y niños.
Ataque a su supervivencia
"El robo de suministros vitales destinados a niños desnutridos es indignante y un ataque directo a su supervivencia., " dijo Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF.
"Estos actos atroces contra niños vulnerables deben terminar.Todas las partes deben adherirse al derecho internacional humanitario, proteger a la población civil y garantizar el acceso humanitario seguro y sin trabas a quienes lo necesitan.
UNICEF entregó con éxito estos suministros el 20 de diciembre del año pasado, lo que supone el primer envío humanitario a Jabal Awlia en más de 18 meses. Sin embargo, los saqueos, sumados a la escalada de violencia que ha obligado a suspender las operaciones de ayuda, están llevando a los más vulnerables de la región al desastre.
Los niños, cada vez más cerca de la catástrofe
El hospital está situado en Jabal Awlia, una de las 17 localidades en riesgo de hambruna.
La región ha estado sufriendo una grave escasez de alimentos, medicamentos y otros productos básicos. Los combates han bloqueado el suministro comercial y humanitario durante más de tres meses, dejando a miles de civiles atrapados en medio de la intensificación de los combates.
Más de 4,000 personas se han visto obligadas a huir, lo que profundiza aún más la crisis.
Crisis humanitaria sin precedentes
Más allá de Jabal Awlia, el desastre humanitario se extiende a todo Sudán, donde millones de personas se enfrentan a condiciones que amenazan su vida.
Más de 24.6 millones de personas –más de la mitad de la población– se enfrentan a una inseguridad alimentaria aguda, y el colapso de los servicios de salud, el cierre de escuelas y niveles récord de desplazamiento han creado una crisis sin precedentes.
Ante los crecientes desafíos, UNICEF hizo un llamamiento a todos los actores para que garanticen urgentemente el acceso humanitario sin trabas para prestar ayuda, la protección de los hospitales y la infraestructura civil, así como garantías de seguridad para los trabajadores humanitarios a fin de asegurar que la asistencia vital pueda llegar a los necesitados.