Geir Pedersen se ha reunido con autoridades francesas, alemanas y rusas, informó la ONU el lunes, lo que incluye un encuentro con el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Vershinin, el pasado fin de semana.
Durante todos estos debates, el Sr. Pedersen reiteró la relevancia de los principios básicos de Resolución 2254 (2015) del Consejo de Seguridad, que exige una reforma constitucional, elecciones libres y justas y un proceso político inclusivo dirigido por los sirios.
“Su mensaje sigue siendo coherente”, dijo la portavoz asociada de la ONU, Florencia Soto Niño-Martínez, a los periodistas en Nueva York.
Añadió que el Enviado Especial también espera visitar Siria a principios del próximo año.
Inseguridad sobre el terreno
Mientras tanto, los trabajadores humanitarios informan que las hostilidades y la inseguridad continuaron persistiendo en toda Siria durante la última semana, incluso en las provincias de Alepo, Homs, Hama, Latakia, Tartous, Damasco Rural, Deir-ez-Zor y Quneitra.
“Debido a la tensa situación de seguridad, las operaciones humanitarias siguen suspendidas en varias zonas”, dijo la Sra. Soto Niño-Martínez.
Además, el viernes se informó de hostilidades en Deir-ez-Zor, aproximadamente a un kilómetro de las oficinas de la ONU allí.
Asistencia alimentaria
En una actualización sobre la respuesta humanitaria, la ONU informó que más de 1.7 millones de personas en Siria recibieron asistencia alimentaria durante el mes pasado. Un total de 265,109 personas recibieron otro tipo de asistencia alimentaria, incluidas raciones preparadas, comidas calientes y frescas y cestas de alimentos.
Si bien las escuelas han reabierto en la mayoría de las gobernaciones, la inestable situación de seguridad sigue afectando la asistencia escolar de los niños en las zonas rurales de Hama, Quneitra, Latakia y Tartous.
Apoyo a los repatriados libaneses
Las Naciones Unidas y sus asociados también siguen prestando apoyo en el vecino Líbano a medida que las personas desplazadas regresan a sus hogares.
Más de 800,000 personas han regresado a sus zonas de origen desde que se anunció el cese de las hostilidades el 27 de noviembre, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Sin embargo, más de 160,000 personas siguen desplazadas, aunque la situación sigue siendo inestable.
Los trabajadores humanitarios dijeron que persisten graves desafíos debido a la infraestructura devastada, los servicios esenciales interrumpidos y las constantes preocupaciones de seguridad.
En muchos casos, las familias que intentan regresar siguen desplazadas internamente dentro o cerca de sus comunidades porque sus hogares han sido destruidos o gravemente dañados.
Además, más de 60 aldeas en el sur del Líbano permanecen en zonas donde el ejército israelí está advirtiendo a los residentes que no regresen.