El 29 de julio de 2024, un importante paso adelante para Se anunció el sistema ferroviario de Polonia El Banco Europeo de Inversiones (BEI) concedió un préstamo de 1 millones de PLN (más de 230 millones de euros) a Polska Grupa Energetyczna (PGE), el mayor proveedor de servicios públicos del país. Esta financiación tiene como objetivo modernizar los sistemas eléctricos de la red ferroviaria de Polonia, allanando el camino para servicios más ecológicos y rápidos en los próximos años. El ambicioso proyecto, cuya finalización está prevista para 2028, marca el sexto contrato del BEI con PGE, lo que refleja una sólida relación entre las dos entidades. Actualmente, PGE tiene líneas de crédito con el BEI por un total de 1.3 millones de euros.
La vicepresidenta del BEI, Teresa Czerwińska, destacó la importancia del proyecto y afirmó: “Somos un socio probado para grandes inversiones en infraestructura en Polonia. La modernización de las líneas ferroviarias mejora la calidad de vida de los residentes y beneficia a las empresas. También favorece el desarrollo sostenible, que es una prioridad clave para la Unión Europea”.
La esencia de este proyecto reside en su capacidad de remodelar el panorama energético del transporte ferroviario en Polonia. La financiación cubrirá la construcción de 43 nuevas subestaciones eléctricas y la modernización de 24 adicionales. Estas subestaciones son cruciales para convertir corriente alterna (CA) en corriente continua (CC), un proceso esencial para impulsar trenes de manera eficiente. Además, la inversión apoyará el desarrollo de líneas eléctricas de alta y media tensión, mejorando la infraestructura eléctrica general necesaria para respaldar la red ferroviaria.
Przemysław Jastrzębski, vicepresidente del consejo de administración del grupo PGE, señaló que el avance de los sistemas de energía ferroviaria es imperativo para satisfacer las necesidades específicas del sector. Afirmó: “La cooperación con el BEI nos brinda las herramientas que necesitamos para llevar a cabo esas tareas. Gracias a los fondos obtenidos, podremos invertir en infraestructura energética moderna y desarrollar proyectos innovadores de energía renovable”. Uno de esos proyectos incluye la recuperación y el almacenamiento de la energía generada al frenar los trenes, una innovación significativa para lograr los objetivos energéticos más ecológicos de Polonia.
El proyecto de inversión Modernización de los sistemas eléctricos (MUZa) se centra principalmente en mejorar la seguridad ferroviaria, aumentar la capacidad de las líneas ferroviarias y mejorar la velocidad de los trenes, reduciendo en última instancia los tiempos de viaje de los pasajeros. Esta alineación con los objetivos de transporte sostenible de la Unión Europea facilitará la integración regional, aliviará la congestión del tráfico por carretera y reducirá el consumo de energía, la contaminación del aire y el ruido en toda Polonia.
El BEI, al ser la institución crediticia a largo plazo de la Unión Europea, desempeña un papel fundamental en la financiación de proyectos alineados con EU objetivos de política. Con el compromiso de apoyar 1 billón de euros en inversiones en sostenibilidad climática y ambiental para 2030, el préstamo a PGE es un faro de la ambición de la UE de un futuro más sostenible.
PGE no sólo está liderando la carga de este proyecto; también es un actor crucial en el contexto más amplio de la transición energética dentro de la UE. El objetivo estratégico de la compañía es alcanzar la neutralidad climática para 2050, e iniciativas como el programa Green Rail tienen como objetivo proporcionar al sector del transporte ferroviario energía totalmente limpia procedente de fuentes renovables. Con un objetivo de que el 85% del consumo de energía proceda de fuentes renovables para 2030, PGE está trabajando activamente para encontrar soluciones innovadoras, incluidas tecnologías de almacenamiento de energía.
En conclusión, la iniciativa de modernización ferroviaria de Polonia representa una inversión crítica en la infraestructura verde del país, que se alinea con los objetivos más amplios de la Unión Europea. Este proyecto no solo tiene como objetivo mejorar la eficiencia y la seguridad del transporte, sino que también contribuye a los objetivos de sostenibilidad de la UE, mostrando cómo los proyectos de infraestructura regional pueden fomentar el crecimiento económico y al mismo tiempo avanzar hacia un planeta más verde.