Un nuevo estudio presentado en el Congreso de la Asociación Europea de Psiquiatría de 2024 revela una asociación significativa entre el trastorno por consumo de cannabis prenatal (CUD) y un mayor riesgo de problemas de salud mental específicos.
El cannabis sigue siendo, con diferencia, la droga ilícita más consumida en Europa. Se estima que alrededor del 1.3% de los adultos de la Unión Europea (3.7 millones de personas) consumen cannabis a diario o casi a diario. Aunque los hombres suelen tener una prevalencia más alta con respecto al consumo de cannabis, las últimas estadísticas muestran que las mujeres están alcanzando a los hombres en el consumo de drogas, especialmente entre la población más joven.
Existe una creciente preocupación por el aumento del consumo de cannabis observado entre mujeres más jóvenes en la UE, especialmente entre mujeres embarazadas y lactantes. Esta preocupación se ve amplificada por estudios recientes que han demostrado que el contenido de la sustancia psicoactiva en cannabis (THC) es actualmente alrededor del doble que hace 2 o 15 años, lo que aumenta el riesgo de efectos adversos para las mujeres jóvenes y su descendencia después de su uso durante el embarazo.
Este estudio a gran escala, realizado por investigadores de la Universidad Curtin en Australia, analizó datos de más de 222,000 parejas de madres e hijos en Nueva Gales del Sur, Australia. El equipo de investigación utilizó un enfoque innovador, aprovechando datos vinculados de registros sanitarios, asegurando que tanto la exposición (CUD prenatal) como los síntomas identificados de problemas de salud mental se confirmaran utilizando herramientas de diagnóstico basadas en el sistema de clasificación ICD-10-AM.
El estudio encontró que los niños nacidos de madres con CUD prenatal tenían un riesgo doble de síntomas asociados con el diagnóstico de TDAH y otros problemas de salud mental en comparación con los niños sin dicha exposición. También se encontró un efecto de interacción significativo entre el CUD prenatal y el tabaquismo materno. Además, la investigación encontró efectos sinérgicos entre la CUD prenatal y otras complicaciones del embarazo, como el bajo peso al nacer y el parto prematuro, y el posible desarrollo de los mismos problemas de salud mental.
Estos hallazgos resaltan las posibles consecuencias a largo plazo del consumo de cannabis durante el embarazo y enfatizan la importancia de las estrategias preventivas.
La profesora Rosa Alati, directora de la Escuela de Salud de la Población de Curtin y autora principal del estudio, señaló: "Estos hallazgos resaltan la necesidad de aumentar la conciencia sobre los riesgos asociados con el consumo de cannabis durante el embarazo entre las mujeres que planean quedar embarazadas".
“Este estudio es único porque utiliza datos vinculados con diagnósticos confirmados, lo que proporciona una imagen más sólida de los riesgos potenciales asociados con el consumo prenatal de cannabis. Los resultados subrayan la necesidad de campañas de educación en salud pública e intervenciones clínicas para crear conciencia sobre los riesgos potenciales del consumo de cannabis durante el embarazo y ayudar a las mujeres a tomar decisiones informadas sobre su salud y el bienestar de sus hijos”, explica el Dr. Julian Beezhold. el Secretario General de la Asociación Europea de Psiquiatría.