BIC GINEBRA — En una escalada cruel, y solo dos días después de ataques anteriores contra baháʼís en todo Irán, hasta 200 agentes locales y del gobierno iraní han acordonado la aldea de Roushankouh, en la provincia de Mazandaran, donde vive un gran número de baháʼís, y están utilizando equipos pesados de movimiento de tierras para demoler sus viviendas.
- Las carreteras de entrada y salida del pueblo han sido bloqueadas.
- Cualquiera que intentara desafiar a los agentes era arrestado y esposado.
- Los agentes han confiscado los dispositivos móviles de los presentes y prohibido filmar.
- Se ha advertido a los vecinos que se queden en sus casas y se les ha prohibido filmar o fotografiar.
- Cuatro casas que estaban en construcción ya han sido destruidas.
- Las autoridades están instalando sólidas vallas metálicas para restringir el acceso de los baháʼís a sus propios hogares.
Los baháʼís de Roushankouh han sido blanco muchas veces en el pasado de confiscaciones de tierras y demoliciones de viviendas. Pero este movimiento sigue a semanas de intensificación de la persecución de los baháʼís: más de 100 han sido allanados o arrestados en las últimas semanas.
“Pedimos a todos que alcen la voz y pidan que estos terribles actos de flagrante persecución se detengan de inmediato. Todos los días ha habido nuevas noticias sobre la persecución de los baháʼís en Irán, lo que demuestra inequívocamente que las autoridades iraníes tienen un plan paso a paso que están implementando, primero mentiras descaradas y discursos de odio, luego redadas y arrestos, y hoy acaparamiento de tierras. , ocupaciones y destrucción de hogares”, dijo Diane Ala'i, representante de la Comunidad Internacional Bahá'í (BIC) ante las Naciones Unidas en Ginebra, refiriéndose a las últimas semanas. “¿Qué será lo próximo? La comunidad internacional debe actuar antes de que sea demasiado tarde”.